Zacualpan y sus dos cañones

Historia de los cañones de Zacualpan

Esta historia se da en el contexto de la intervención francesa, la cual involucra tres batallas entre liberales y conservadores a finales de 1863 y principios de 1864 que tuvieron impacto en la región que abarca: Huayacocotla, Zacualpan, ambos del Estado de Veracruz; San Bartolo Tutotepec, Tenango de Doria y San Pedrito, todos ellos del Estado de Hidalgo.

El objetivo era controlar Tutotepec, Hidalgo; posición estratégica, pues en aquélla época era el paso hacia la Huasteca.

El enemigo tomó Tuto en noviembre de1863, por lo que era indispensable retomar la plaza cuanto antes y prevenir que los demás pueblos sufrieran la misma suerte.

Así las cosas, para el 31 de diciembre se coordinó un contraatque para retomar su control. Huayacocotla, Zacualpan, Tenango y los «leales» de Tuto participarían en este combate, que finalmente fue exitoso.

Tan fue exitoso el combate que el enemigo huyó y dejó abandonadas «dos piezas de montaña (dos cañones medianos que permitían ser ‘fácilmente’ transportados)» y tres cañones de metralla de 25 tiros, junto con seis cajones de parque.

Don Antonino Acosta iba al frente de las fuerzas de Zacualpan, que debieron ser aproximadamente 30 hombres.

No existe certeza respecto de si estas dos piezas de montaña son las que llegaron a parar a Zacualpan, pero en opinión del autor del libro es poco probable que así haya sido.

Sin embargo, como Tutotepec era considerado estratégicamente prioritario por ambos bandos, habría de darse una tercer batalla que sería la decisiva y la que convocó a la mayor cantidad de hombres.

Un reporte de inteligencia que llegó a manos del Comandante Militar de Tulancingo afirmaba que el enemigo intentaría retomar Tutotepec el 15 de enero de 1864. La estrategia de ataque de los invasores sería que el Coronel Agustín Cravioto avanzaría desde Tenango con 230 hombres, mientras el Teniente Coronel Paulino Noriega llegaría con otros 400 desde Zacualpan. Según dicho reporte, tres toques que asamblea sería la señal que indicaría que las fuerzas estarían en posición y listas para atacar.

Al enterarse de esto, el Comandante Militar de Tulancingo, ordenó que los 120 elementos de caballería del Batallón de Chignahuapan, en unión de las fuerzas de Zacualpan, Huayacocotla y Tutotepec, avanzarían por el rumbo de Zacualpan para contrarrestar a Noriega (ver mapa).

Por el rumbo de Tenango mandó que avanzaran las fuerzas de Acaxochitlán en donde estaría Cravioto y adicionalmente mando situar 100 infantes de Tulancingo y otros 70 de caballería en Acatlán.

No obstante, un hecho no previsto, alteró los planes de ambos bandos, pues el 14 de enero de 1864 se presentó una escaramuza en Tenango entre las fuerzas de Tutotepec y el enemigo encabezado por Paulino Noriega. El saldo fue de seis muertos y tres heridos. Noriega y sus hombres se retiraron a San Pedrito y los «leales» a su pueblo Tutotepec, para resguardar la Plaza.

El día siguiente -15 de enero, el Escuadrón de Chignahuapan con todo y sus 120 caballos llegó a las diez de la mañana a Zacualpan, ahí esperaron otras tropas que llegaron a las siete de la noche. Por la madrugada emprendieron la marcha hacia San Pedrito.

Esa misma noche los «leales» de Tutotepec escucharon un tiroteo por el rumbo de San Pedrito, por lo que también inmediatamente marcharon hacía ese pueblo llegando a las cinco de la mañana y descubrieron que el enemigo ya estaba internado en número de 400 infantes y 50 elementos de caballería.

A las seis de la mañana del 16 de enero de 1864 se inició el combate, las fuerzas de caballería de Chignahuapan conjuntamente con las de Tuto, Zacualpan y los «leales» de San Pedrito.

Se sabe que al frente de las fuerzas de Zacualpan iban Don Antonino Acosta y Pascual Leyva.

La narración de la batalla la pueden encontrar directamente en el libro, pero se sabe que se pudo expulsar al enemigo de San Pedrito, dispersándolo completamente haciéndole multitud de muertos, heridos, prisioneros y haciendo una persecución de poco más de tres leguas.

Entre el botín de guerra que el enemigo dejó abandonado se encontraron «dos piezas de artillería», es decir, dos cañones, los cuales se especula son los que llegaron a Zacualpan.

Se trata de mera especulación, pues no se sabe con exactitud cuál par de cañones fueron a dar a Zacualpan, si los tomados en Tutotepec o los de San Pedrito, pero todos los indicios que se tuvieron a la mano llevan a concluir que es más probable que sean los de el último pueblo, pues está a escasos cinco kilómetros de Zacualpan y Tuto ya tenía los suyos de la batalla de 31 de diciembre.

En la siguiente fotografía tomada aproximadamente en 1950, se pueden ver los dos cañones enterrados hasta el muñón enfrente de la Presidencia Municipal.

.Cañones enfrente de la Presidencia Municipal

Mapa que se incluye para referencia de las batallas.

Mapa

3 respuestas »

  1. Mi abuela es de zacualpan se llama celina licona dominguez, llego a poza rica como a los 10 años y ya no regreso a su pueblo su mama se llamaba carolina dominguez, por favor si alguien tiene datos si hay algun familiar de ella o se acuerde de ella hagamelo saber queremos ir pues mi abue tiene 60 años que no va. Se los agradeceria muchisimo.

  2. Hay varias personas de apellido Dominguez en la comunidad de la baldesa y los Licona de la congregación Tlachichilquillo dos comunidades muy cercanas a la cabecera. La baldesa a escasos 5 minutos y Tlachichilquillo es la segunda comunidad que encuentras cuabdo bienes para Zacualpan

  3. En realidad La Glorieta, junto con los cañones y la estatua a Hidalgo, ya existían a finales de la década de los años 60 del siglo XX. Yo llegue a estudiar la primaria a Zacualpan en 1958 y la Glorieta ya era parte importante de la plaza del pueblo. estaba ubicada, frente a la casa del Sr. Enrique Hernández, mi padrino que epd.

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